"El kitsch es el ideal estético de todos los políticos y de todos los partidos y movimientos políticos. Aquellos de nosotros que vivimos en una sociedad donde diversas tendencias políticas coexisten y las influencias en competencia se cancelan o limitan entre sí podemos lograr, más o menos, escapar de la inquisición del kitsch: el individuo puede preservar su individualidad; el artista puede crear obras inusuales. Pero siempre que un solo movimiento político acapare el poder, nos encontramos en el reino del kitsch." — Milan Kundera