El derecho a bifurcar el código es una libertad inalienable, pero puede fragmentar el esfuerzo, dividir a los testers y confundir a los operadores. Valores predeterminados razonables, configuraciones configurables y un proceso transparente reducen la presión por el "sabor de política", manteniendo la energía enfocada en el repositorio principal. Estoy de acuerdo con Adam.