Anoche estaba poniéndome al día con mi querido amigo y me detuve y dije: “es una locura que seamos amigos desde hace 35 años.” Hace un mes, vi a otra amiga cercana a quien conocí en el trabajo hace 20 años y ella me recordó un momento importante que había olvidado por completo. Esa historia compartida y conocimiento son tan raros, y probablemente se están volviendo más raros a medida que las personas se vuelven más móviles y la vida más efímera. El tiempo es su propia magia. Sana todas las heridas y sella la mayoría de los lazos. Nunca deseches cosas viejas a la ligera.