Me he reunido con el Patriarca latino de Jerusalén, el cardenal Pizzaballa. En la víspera de Navidad, le reiteré la atención secular de Francia hacia los cristianos de Tierra Santa. Hemos intercambiado especialmente sobre la situación en Gaza y en Cisjordania. He elogiado el compromiso de las instituciones, los fieles y los religiosos que continúan asistiendo a las personas más vulnerables, en condiciones muy difíciles. He presentado al cardenal Pizzaballa mis deseos de paz para los pueblos de Oriente Medio, especialmente para los cristianos de Tierra Santa. También le he expresado la determinación de Francia de seguir actuando por la seguridad de todos en la región.