Nací con un trastorno raro. En el año de mi nacimiento, solo otros dos niños nacieron con él en cualquier parte de la tierra. Debido a esto, los primeros 15 años de mi vida los pasé en consultorios médicos y quirófanos. Personas como la Sra. Siddiqui miraban mi historial médico y decían que hubiera sido mejor "para mí" que nunca existiera por todo el dolor y el desafío por el que yo, y mi familia, seamos claros, tuvimos que pasar. Y, sin embargo, existo, un hecho del que estoy bastante feliz. La vida ha estado lejos de ser perfecta, pero ha sido una vida, y donde hay vida hay esperanza. Siddiqui aboga por la muerte y el nihilismo bajo el disfraz de la compasión. Estas son mentiras. En el corazón de esto hay una oscuridad que pocos pueden comprender realmente. Es un thanatos, un impulso de muerte. Oren por la Sra. Siddiqui y por todas las almas no nacidas a quienes ella y los de su clase nunca permitirán conocer la vida.