Trump anuncia aranceles del 100 por ciento a China, los titulares llegan gruesos y rápidos, los comentarios explotan y todos actúan como si este fuera el gran momento nuevamente. China reaccionará, Washington relativisará, se extenderán los plazos, se ajustarán las condiciones y, al final, como suele ocurrir, todo se revisará o se abandonará silenciosamente. Los mercados han aprendido a ver a través de este juego. Reaccionan brevemente, pero saben que el ruido político no obliga a un cambio. El oro en un máximo histórico, las acciones en un máximo histórico, Bitcoin rezagado al alza, no porque los fundamentos sean más sólidos, sino porque la liquidez, las expectativas y el comportamiento reflejo determinan el sistema. Estamos en la burbuja de todo donde todo se levanta porque nadie quiere terminar el juego que funciona para todos. Cada caída se compra, no por optimismo ciego, sino porque el impulso se confirma. Quizás eso acabe en algún momento, pero por ahora sigue jugando, lógicamente, porque funciona. Nadie sabe cuándo se detendrá la música, pero mientras esté sonando, bailar es racional. Agregué más. listo para el último baile. 🕺